Arte tribal africano

Esculturas figurativas antropomorfas del reino yoruba

Esta obra es excepcional por su tamaño y la complejidad de su composición. Presenta una figura femenina apoyada en el respaldo de un asiento en el que se sienta un dignatario o un rey. Estas estatuas forman una encarnación de los muchos orisa de los yoruba, equivalentes a los santos cristianos. Las figuras en miniatura que lo rodean serían adeptos o deidades menores.

Entre los yoruba, los templos públicos, los altares o las cabañas de los jefes están adornados con dinteles, puertas y pilares esculpidos o estatuas de tamaño natural dedicadas a los dioses míticos "orisa" y que supuestamente atraen sus beneficios. Centrada en la veneración de sus dioses, u orisà, la religión yoruba se basa en esculturas artísticas con mensajes codificados (aroko). Están diseñados por los escultores a petición de los seguidores, adivinos y sus clientes. Se cree que estos espíritus interceden ante el dios supremo Olodumare.
Los reinos de Oyo e Ijebu surgieron tras la desaparición de la civilización de Ifé y siguen siendo la base de la estructura política de los yoruba. Los Oyo crearon dos cultos centrados en las sociedades Egungun y Sango, todavía activas, que veneran a sus dioses, los Orisa, a través de ceremonias en las que utilizan máscaras, estatuillas, cetros y soportes de adivinación. El comercio de esclavos ayudó a difundir las creencias yoruba en todos los continentes.
Pátina costrosa policromada, descamación local, grietas de desecación.br /> Fuente: "Yoruba" B. Lawal.